Clavo de Olor Entero

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Descripción

En toda buena cocina tradicional no puede faltar el clavo. Proporciona a los platos una mezcla de sabores única en un solo producto: acre, caliente, refrescante, picante, dulce y astringente, tanto en elaboraciones saladas como dulces.

A esta especia hay que tomarle el punto al usarla en la cocina, sin pasarse en cantidad, pero permitiendo que despliegue su toque de aroma y sabor peculiar.

Si repasamos todas las culinarias conocidas, no hay plato que no la utilice en salsas, guisos variados, potajes de legumbres, arroces, conservas de todo tipo, escabeches, bebidas, licores o elaboraciones dulces, como las deliciosas galletas de canela y clavo.

Combina muy bien con la pimienta, la cúrcuma, el jengibre, el cilantro, el comino, el anís estrellado, la canela y el ajo, depende de si el plato es dulce o salado. No puede faltar en los panes de especias, tampoco “clavarlos” en las cebollas o zanahorias al horno, ¡una delicia!

El clavo de olor se recomienda siempre en elaboraciones que precisen maceración, no sólo por su aporte aromático, sino porque ayuda a conservar los alimentos libres de bacterias nocivas por sus propiedades antisépticas.

El clavo es una especia formada por los capullos sin abrir de las flores de un árbol de hoja perenne perteneciente a la familia del mirto.

Dentro de los beneficios del clavo en grano podemos encontrar que es un remedio para eliminar la mucosidad de las vías respiratorias, alivia el dolor de muela, protege la salud bucodental, combate el mareo y los vómitos, tiene acción analgésica, combate el ardor de estómago y elimina los parásitos intestinales.

Además, el clavo en grano tiene acción analgésica, efecto antiinflamatorio, acción anestésica y sedante, por lo tanto ayuda también a combatir el insomnio.